lunes, 29 de agosto de 2011

Magia,

Bebimos vodka de emociones, JB de alegrías y Martini de la juerga de nuestros cuerpos. Bailamos al sonido de la música, al compás de nuestros cuerpos, al revolteo de tus caderas. Tenemos una resaca de pensamientos, de ilusiones alocadas. Fue una noche de un "ven y sígueme". Fue mágica, pero sin magos y sin trucos.

martes, 9 de agosto de 2011

Siento por ti lo que nunca por nadie sentí

Le conoces del colegio, pero nunca habéis hablado. Aunque nunca has pensado en él como en una pareja, a veces has tenido ganas de hablar con él, "¿Cómo será?", piensas siempre que lo ves conectado, pero nunca tienes la valentía de descubrirlo. Y de repente un día te empieza a hablar "¿Qué hace este chico?", piensas, pero le contestas y empezáis a hablar, te hace bromas, te cuenta cosas, te ríes y le sigues las gracias. Te dice que le caes bien, tontea contigo y tú le sigues el rollo. Te dice que te quiere, y tú también y no sabe cuánto, que le gustas, pero no sabes a que sentido de "querer" se refiere así que no le dices nada. Te pasas las tardes delante de la pantalla del ordenador esperando a que se conecte, a que te hable, a que dé señales de vida. Cada día estás por delante de su clase, a ver si tienes suerte y hablas un rato con él, le sonríes, te sonríe, y parece que puedes volar. Entras en tu clase y, por mucho que lo intentes, no puedes centrarte en las explicaciones del profesor, él está en medio, en tu cabeza y no para de dar vueltas por ahí y piensas en si a él le pasa lo mismo contigo, aunque lo dudas, es dos años mayor que tú, ¿Cómo se iba a fijar en una enana? Y al final te das cuenta de una única cosa: La has cagado.
Empiezas riéndole las gracias y acabas pillada por él hasta las cejas, quedas avisada.