sábado, 17 de diciembre de 2011

Es mi adicción...

"Él", pensaréis. Pues, ¿sabéis que? Va a ser que no. Ni él, ni ella, ni tú, ni nadie. Nadie, pero sí algo, una tontería para muchos, un mundo para pocos afortunados. Sí, os estoy hablando del voleibol, ese deporte que tiene una red en medio y no es el tenis, ni el badminton, ni pádel... Nada de raquetas. Brazos, manos, dedos... Adoro el terreno de juego, cada línea que marca el campo, cada campo que he pisado, y los que no. Vivo por jugar, no por ganar ni perder, eso es lo de menos. Simplemente 12 jugadores en el campo y un balón me hacen ser la chica más feliz de este mundo y de los que haya. No pido más, solo poder seguir jugando y no tener que dejarlo nunca.